He pasado mucho tiempo pensando en escribir, y cada día el malestar se acentúa pues siento que de haber empezado cuando comencé a pensar en escribir, pues ya habría escrito mucho, o al menos más de lo que llevo ya, estas tres líneas.
Siento que tengo mucho que transmitir, solo que cuando me pongo, no encuentro como decirlo. Hay muchas cosas que no se pueden atrapar entre las infinitas combinaciones del abecedario.
No todo merece ser publicado.